Ruta 5 Días 5 Noches desde Tánger hasta Marrakech.


                                                                Día 1: Tánger- Chauen.
 
Salida desde Tánger hacia el pequeño y encantador pueblecito de Chauen, la cuidad que te envuelve desde el primer minuto (casas y callejuelas blancas y azules, subidas y bajadas, escondites, fuentes, plazas, escaleras…) una preciosidad que recuerda a pueblos andaluces como Vejer de la frontera en Cádiz. Alojamiento en una preciosa casa tipo Riad marroquí y resto de la tarde para regatear en el zoco, cenar en la plaza deliciosa comida marroquí, harira, cuscús, tagin…a la luz de las velas y noche estrellada.

                                                           Día 2: Chauen- Volubilis- Fes.
 
Salida hacia las ruinas de Volubilis el principal yacimiento arqueológico de Marruecos (La ciudad más antigua y de las más importantes que Roma tuvo en el norte de África). Continuar  la ruta hasta la ciudad de Fez,  capital cultural y la más antigua de las ciudades imperiales de Marruecos, considerada por la UNESCO Patrimonio de la Humanidad. Fez te envuelve en un halo de misterio y te traslada a otra época al caminar por su impresionante Medina sus típicos comercios, barrios artesanos y los famosos curtidores, donde lavan y tiñen las pieles.  Admirar el Palacio Real, el exterior de la Mezquita, la escuela coránica Al Bouanania y la Universidad El Quaraouiyne. Se recomienda visitar la Medina con un guía local, que te explicará  los cinco símbolos que todo barrio debe poseer; mezquita, horno, fuente, haman y escuela coránica, para terminar con una bella panorámica de Fez y sus alrededores. Alojamiento en Fez.
                                     Día 3: Fez – Ifrane - Azrou - Atlas medio - El Desierto.

Por la mañana salida desde Fez hacia el desierto pasando por Ifrane (cuidad llamada la Suiza marroquí) por la forma de sus casas y sus montañas blancas cubiertas de nieve. Continuar hasta Azrou, parar en el bosque de cedros, el último refugio del mono macaco. Después de almorzar en el camino, llegada a un pequeño pueblo llamado Hassi Labiad donde disfrutar de una magnífica excursión en dromedario, contemplando el desierto de Erg Chebbi, famoso por sus dunas de arena dorada, apreciar la magnífica puesta de sol. Llegada al campamento al atardecer  para relajarse bajo el cielo inolvidable que  ofrece el desierto, dormir al abrigo de las estrellas, encima de una duna o dentro de  una haima (tienda nómada tradicional hecha de pelo de dromedario). Cena en el campamento.

         Día 4: El Desierto- Rissani - Gargantas del Todra - Gargantas del Dades - Ouarzazate.

Madrugar para aquellos que quieran aprovechar el impresionante amanecer desde la gran duna, vuelta del campamento al Hotel en dromedario. Traslado a Rissani (primera ciudad Imperial de Marruecos). Visita del Mausoleo Moulay Ali Cherif y el mercado local para ver el zoco tradicional, mercado de burros, especias y mucho más. Almorzar en el camino, pasar por Tinghir, las Gargantas del Todra, un estrecho desfiladero con dos paredes verticales de más de 300m de altura, situado en un valle repleto de palmeras y pueblos bereberes, El Valle del Dades (valle de las mil Kasbahs) y El Valle de las Rosas El Kelaa M'gouna (un pueblo conocido por sus cultivos de rosas). Llegada a Ouarzazate (Hollywood de Marruecos) cena y alojamiento en el Riad.
                                        Día 5: Ouarzazate- Ait Ben Haddou-  Marrakech.
Desayuno en el Riad, visita de Kasbah Tourirt, construida de adobe con sus torres almenadas, salida de Ouarzazate para visitar la Kasbah Ait Ben Haddou (declarada Patrimonio de la humanidad por la UNESCO), un lugar precioso, en ella se han rodado más de 20 películas, como Gladiator, Obelix, Sahara con Penélope Cruz… Continuar hacia Marrakech,  atravesando las montañas del Alto Atlas pasando por el puerto de montaña Tizi N' Tichka (2260m), admirar las vistas espectaculares y pueblos bereberes. Parada en el camino para almorzar, visitar las cooperativas del famoso y admirado aceite de Argán. Llegada a Marrakech por la tarde para aprovechar la cuidad roja, famosa por su plaza Jemâa el Fna (uno de los sitios más intensos donde se reúnen  todo  tipo de personajes singulares como músicos, bailarines, magos, encantadores de serpientes, cuentacuentos, malabaristas y  artesanos). Alojamiento en la increíble ciudad de Marrakech.
 

Ruta 3 Días 2 Noches Desde Marrakech al Desierto.


                          Día 1: Marrakech-Ait Ben Haddou-Gargantas del Dades
 
Salida desde Marrakech hacia las Gargantas del Dades, atravesando las montañas del Alto Atlas, pasando por el puerto de montaña Tizi N' Tichka (2260m), admirar las vistas espectaculares y pueblos bereberes. Parada para almorzar, visita de la Kasbah Ait Ben Haddou (declarada Patrimonio de la humanidad por la UNESCO), un lugar precioso, en ella se han rodado más de 20 películas, como Gladiator, Obelix, Sahara con Penélope Cruz, y series de televisión como Juego de Tronos... Pasar por Ouarzazate (Hollywood de Marruecos) y continuar por el Valle de las Rosas, el Kelaa M'gouna (un pueblo conocido por sus cultivos de rosas) hasta llegar al Valle del Dades (valle de las mil Kasbahs). Alojamiento en hotel en las Gargantas del Dades, disfrutando de una cena típica marroquí y del entorno donde se sitúa este lugar, que es espectacular.
 
                        Día 2: Gargantas del Dades- Gargantas del Todra-Hassi Labiad (el Desierto).
Desayuno en el hotel y salida hacia Tinghir, las Gargantas del Todra, un estrecho desfiladero con dos paredes verticales de más de 300m de altura, situado en un valle repleto de palmeras y pueblos bereberes. Después de almorzar en el camino, llegada a un pequeño pueblo llamado Hassi Labiad donde disfrutar de una magnífica excursión en dromedario, contemplando el desierto de Erg Chebbi, famoso por sus dunas de arena dorada, apreciar la magnífica puesta de sol. Llegada al campamento al atardecer para relajarse bajo el cielo inolvidable que ofrece el desierto, dormir al abrigo de las estrellas, encima de una duna o dentro de una haima (tienda nómada tradicional hecha de pelo de dromedario). Cena en el campamento.
                      Día 3: Hassi Labiad- Rissani- Valle del Draa- Ouarzazate-Marrakech.
Madrugar para aquellos que quieran aprovechar el impresionante amanecer desde la gran duna, vuelta del campamento al Hotel en dromedario. Una vez allí se puede disfrutar de una buena ducha y el desayuno. Después traslado a Rissani (primera ciudad Imperial de Marruecos). Visita del Mausoleo Moulay Ali Cherif  y el mercado local  para ver el zoco tradicional, mercado de burros, especias y mucho más. Seguidamente continuar hacia Ouarzazate pasando por Alnife, Tazarine, el Valle del Draa (el oasis más importante del sur de Marruecos), con su desfile de palmeras y el pueblo bereber de Agdez, pasando por el Anti- Atlas donde se ha rodado la película de Babel. Parada en Ouarzazate para comer y visitar La Kasbah Tourirt, construida de adobe con sus torres almenadas, salida de Ouarzazate hacia Marrakech, pasando por el puerto de montaña Tizi-N-Tichka, admirar el paisaje y visitar las cooperativas del famoso y admirado aceite de Argán. Llegada a Marrakech por la tarde-noche para aprovechar la cuidad roja.
 
 

Ruta 3 Días 2 Noches desde Fez al Desierto


                                      Día 1: Fez – Ifrane - Azrou - Atlas medio - El desierto.

Por la mañana salida desde Fez hacia el desierto pasando por Ifrane (cuidad llamada la Suiza marroquí) por la forma de sus casas y sus montañas blancas cubiertas de nieve. Continuar hasta Azrou, parar en el bosque de cedros, el último refugio del mono macaco. Después de almorzar en el camino, llegada a un pequeño pueblo llamado Hassi Labiad donde disfrutar de una magnífica excursión en dromedario, contemplando el desierto de Erg Chebbi, famoso por sus dunas de arena dorada, apreciar la magnífica puesta de sol. Llegada al campamento al atardecer  para relajarse bajo el cielo inolvidable que  ofrece el desierto, dormir al abrigo de las estrellas, encima de una duna o dentro de  una haima (tienda nómada tradicional hecha de pelo de dromedario). Cena en el campamento.

                           Día 2: Khamlia- Las tierras nómadas- Tisradmin- Hassi Labiad.

Madrugar para aquellos que quieran aprovechar el impresionante amanecer desde la gran duna, vuelta del campamento al Hotel en dromedario. Una vez allí se puede disfrutar de una buena ducha y el desayuno. Después visitaremos el pueblo de Khamlia (habitantes de orígenes de Mali y Sudan) para escuchar típica música africana. Recorrido por las dunas del Erg chebbi atravesando el desierto negro cerca de la hamada (la frontera con Argelia), visitando las tierras nómadas, parada en el increíble Oasis de Tisradmin (un pueblo semi-nómada) un lugar alejado de la ciudad que conserva el encanto de una pequeña aldea, podremos compartir un delicioso té y el acto social que representa la bienvenida y la hospitalidad para una típica familia bereber. Vuelta a Hassi Labiad,  atardecer en las dunas. Cena y alojamiento en el Hotel.

                                   Día 3: Hassi Labiad-Rissani-La valle de Ziz-El atlas Medio - Fez.

Por la mañana desayuno en el hotel y traslado a Rissani (primera ciudad Imperial de Marruecos). Visita del Mausoleo Moulay Ali Cherif  y el mercado local de Rissani para ver el zoco tradicional, mercado de burros, especias y mucho más. Seguidamente continuar hacia el atlas medio, pasando por el Valle del Ziz con sus vistas panorámicas, admirar el paisaje, hacer fotos y ver el palmeral. Pasar por el puerto de Tizi-N-Talghomt (Cuello del Chamelle en berber) a 1.907 metros de altitud, donde el relieve es impresionante. Almorzar en el camino. Llegada a Fez,  capital cultural y la más antigua de las ciudades imperiales del país.

 

Fin de Año en el Desierto

Que mejor lugar para dar la bienvenida al año nuevo que el Desierto mágico de Marruecos.
Cuéntanos que te gustaría ver, conocer y vivir.
Dinos donde te recogemos, los días de que dispones y déjate sorprender con Marruecos Dream.
 

Turismo Sostenible, Responsable y Solidario.

Entendemos el Turismo  como: Responsable, Sostenible y Solidario, ambos conceptos relacionados entre sí  y que se complementan.
Responsable, con el medio natural que te rodea, respetando las costumbres y tradiciones de las gentes y lugares que visites.
Sostenible, cuando contribuyes  al desarrollo de la economía local, comprando a los artesanos o comerciantes locales o alojándote en las casas de las familias, ayudando así a la sostenibilidad de la comunidad.
Solidario, cuando colaboras con alguna familia o asociación local realizando actividades, visitando y conociendo su día a día y sus proyectos.

Marruecos, paraíso de contrastes.

En Marruecos encontrarás,
 Ciudades increíbles con sus zocos, su historia y sus gentes.
La montaña con pueblos pintorescos y actividades de aventura.
La playa para descansar y disfrutar
Desierto para perderte en su cultura, las puestas de sol y los amaneceres, donde el tiempo se detiene y parece que has viajado a otra época.
 
Marruecos se encuentra en la encrucijada entre Europa y África, el Mar Mediterráneo y el Océano Atlántico. Gracias a su diversidad es un destino popular para los turistas de todo el mundo.
Marruecos es conocido por su diversidad cultural y étnica, ha sido gobernado por diferentes pueblos o civilizaciones que han dejado sus huellas en el país, como los Fenicios, Cartagineses, Cristianos, Árabes y Dinastías además de las influencias europeas, Francia y España en particular.
Desde  1950 Marruecos pasó por grandes cambios sociales. La cultura tribal tradicional estaba cambiando cada vez más hacia una cultura orientada a la familia, con más individualización.
Los dos grupos étnicos más grandes de la población son los árabes y los bereberes. Los idiomas oficiales son el árabe y el idioma bereber (tamazight); en la mayoría de lugares se habla francés. 
 
LA  CULTURA

Marruecos tiene mucha historia y una  gran riqueza cultural. Ciudades  imperiales llenas de arquitectura, madrasas, mosaicos y kasbahs impresionantes, oficios antiguos, música, baile y una cocina que combina influencias africanas y mediterráneas.
Fez, Meknes, Rabat y Marrakech,  son las cuatro ciudades denominadas imperiales ya que una vez fueron elegidas como capital por antiguos sultanes.
Las Kasbahs forman un maravilloso ejemplo de la arquitectura tradicional, estas fortalezas francas ofrecen la protección de personas en tiempos de peligro, la más famosa es  Kasbah  Ait Ben Haddou en la región de Ouarzazate.
La Artesanía, oficios antiguos como el trabajo del cobre, trabajos en madera, cerámica, cuero y tapicería son oficios que se practican todavía  a un  alto nivel.
 

LA GASTRONOMÍA.

Las comidas son una importante actividad social en la vida cotidiana. La gente se reúne alrededor de un plato grande lleno de alimentos, utilizando la mano derecha para comer.

El Tajine, un plato muy conocido, es un guiso llamado así por el utensilio de barro especial en el que se cocina.

El Cuscús, es un famoso plato hecho de un tipo de trigo que se cocina lentamente al vapor de un caldo de verduras y carne.
El Té a la menta es la bebida más popular, se  prepara siguiendo el ritual tradicional, hirviendo los granos de té verde  en la tetera, seguidamente se añaden las hojas de menta  y azúcar. Se sirve en vasos pequeños, manteniendo la tetera por encima de  los vasos y  acercándola a los mismos con un movimiento fluido sin derramar ni una gota. Se disfruta en compañía de la familia y amigos.  Es símbolo de la hospitalidad y bienvenida de cualquier invitado o visitante.
 
LAS ESPECIAS.
Ras al-hanout (la cabeza de la tienda) es la mezcla de especias más famosa de Marruecos, contiene: jengibre, pimienta, canela, nuez moscada, cardamomo, pimienta blanca, clavos, cúrcuma...
Es imprescindible en la cocina marroquí el comino, jengibre, cúrcuma, azafrán y canela.
La páprika más utilizada en Marruecos, es el pimentón dulce español. Se usa tanto por su color como por el sabor que aporta. Es sensacional en tajines, salsas, guisos o broquetas con el tomate como ingrediente principal.
El comino llamado kamoon en árabe, es también característico de Marruecos. Recién molido, se sirve muy a menudo, junto con la sal en la mesa como condimentos para aromatizar los asados. Es esencial también en muchos modos de preparar la kefta (carne picada), las carnes y algunas ensaladas y sopas.
El azafrán, una de las especias más caras del mundo, se cultiva en el sur de Marruecos.
La canela es utilizada en numerosos pescados, perfuma postres y aromatiza muchos platos de carne.
En cuanto a la cúrcuma, se usa como sustituto del azafrán en las aplicaciones culinarias y en otras mezclas de especias.
El jengibre, llamado skenybir en árabe, tanto en polvo como entero, seco o fresco, grande o pequeño, aporta un aromático y revitalizante sabor picante a los tajines  y a las sopas. Para aromatizar sus platos, los marroquíes recurren a muchas hierbas y esencias.
El cilantro, planta aromática que se incluye en la preparación de numerosos platos, como ensaladas, sopas, estofados o pescados, es muy apreciado por la gastronomía marroquí y ofrece a los platos su perfume característico.
 
LA COSMÉTICA NATURAL
La Henna, una planta apreciada por sus propiedades medicinales, forma parte esencial de la cultura marroquí, estando presente en todos los acontecimientos, familiares, religiosos y festivos.
El Argán, una antigua planta protegida por la UNESCO, el aceite de su fruto, posee infinitas propiedades y es rico en vitamina E, se utiliza para uso alimentario y cosmético.
El Khol, (sulfuro natural de antimonio) polvo extraído de un mineral, utilizado para embellecer los ojos y también como colirio natural. Se aplica con un palito de madera pequeño. El buen khol es el que pica un poco al aplicarlo.
El Ghasul, una arcilla jabonosa natural, original de Marruecos, que posee excelentes propiedades como detergente y desengrasante, se suele utilizar para el lavado del cabello.


EL PAISAJE
Marruecos está enclavado en el ángulo noroeste de áfrica, entre el mar Mediterráneo, que lo tiñe al norte y el océano Atlántico al oeste.
El paisaje en Marruecos te sorprende, montañas cubiertas de nieve en el norte y los desiertos con sus mares de arena en el sur.
La cordillera del Atlas atraviesa  el país desde el suroeste al noreste y  se extienden  hasta   Argelia y Túnez,  sin olvidar  sus espléndidas playas de arena fina desde la costa mediterránea hasta el atlántico. 
 
HACER UN VIAJE A MARRUECOS ES UNA EXPERIENCIA INSPIRADORA